La mousse de naranja con leche condensadaes un postre cremoso y delicioso muy fácil de preparar. Si quieres sorprender a tu familia o preparar un postre con naranjas sabrosopara tus invitados, atentos a la receta. Te va a sorprender como con tan pocos ingredientes y casi sin trabajo se consigue un gran resultado. ¡Y puedes prepararlo con antelación, que siempre es buena idea cuando recibes gente en casa!
Te vamos a dar todos los trucos para conseguir una mejor textura y buenas ideas para una presentación espectacular.
Receta de mousse de naranja con leche condensada: cómo se hace
Vas a necesitar pocos ingredientes y todos son muy comunes, te damos la lista. Para aportar el mejor sabor, ya sabes, elige calidad, recuerda que puedes comprar naranjas de Valencia en Naranjas Julián.
Ingredientes para 8 raciones de este postre delicioso
- 500 ml de nata especial para montar 35% de materia grasa.
- 395 g de leche condensada.
- Las naranjas necesarias para obtener 400 ml de zumo de naranja recién exprimido + dos para presentación.
- 6 hojas de gelatina neutra.
- Toppings para decorar (opcional).
Cómo se hace la mousse de naranja con leche condensada paso a paso
- Enfría muy bien la nata para poder montarla con facilidad. Puedes poner el brick o botella en la nevera y luego en una cubitera con hielos. No debe congelarse pero sí estar muy fría. Asegúrate de que el porcentaje de grasa es del 35% para que monte bien.
- Pon las hojas de gelatina en un cuenco con agua muy fría. Deben hidratarse unos 10 minutos.
- Monta la nata en un cuenco grande y seco con ayuda de unas varillas de mano o eléctricas. Si dispones de un aparato de cocina con varillas también puedes usarlo para hacerlo más cómodamente. Cuando esté montada, para.
- Exprime las naranjas para obtener 400 ml de zumo y ralla la piel de dos de ellas después de lavarlas y secarlas.
- Pon un cacito al fuego con el zumo de naranja y cuando se caliente diluye en él las hojas de gelatina previamente escurridas. Aprieta bien con las manos para eliminar el agua de más antes de introducirlas en el cazo.
- Vierte en un cuenco la leche condensada, el zumo de naranja en el que has diluido la gelatina y la ralladura de naranja. Mezcla bien hasta obtener un conjunto homogéneo de aspecto cremoso.
- Para preparar la mousse de naranja con leche condensada debes ir añadiendo la nata montada poco a poco. Cada vez pon un par de cucharadas y mezcla muy suavemente, con movimientos envolventes, para que coja cuerpo y no se baje.
- Una vez hayas incorporado toda la nata montada a la mezcla el conjunto debe tener una consistencia cremosa, fina, homogénea y sin grumos.
- Vierte la mezcla en 8 recipientes de ración. Puedes usar copas de postre, vasos anchos o cuencos individuales, como prefieras.
- Cubre con papel film para que no coja sabores extraños y deja reposar en la nevera. La mousse de naranja con leche condensada necesita permanecer en frío entre 4 y 6 horas para estar en su punto. No cuaja a temperatura ambiente y no queda bien si la congelas.
- Para la presentación, pela al vivo las naranjas restantes y pon dos o tres gajos en la superficie de la mousse de naranja justo antes de servirla. Si vas a añadir algún topping es el momento de hacerlo.
Trucos para una mousse de naranja con leche condensada perfecta
- La nata con el porcentaje de grasa indicado y muy fría es clave para que monte con facilidad. No trates de sustituirla por nata en spray porque el resultado no será el mismo.
- Puedes utilizar agar agar o gelatina en polvo en lugar de gelatina en láminas. Fíjate en el etiquetado y calcula el peso requerido para la cantidad de mezcla que quieres cuajar.
- No tengas prisa, ni batas o mezcles la nata con movimientos bruscos y así, al enfriar, la textura de la mousse de naranja será perfecta.
Los mejores toppings para la mousse
Para una presentación de diez y un sabor aún mejor, estos son los mejores acompañamientos para tu receta de mousse.
- Tiras de piel de naranja confitadas.
- Virutas de chocolate negro, blanco o con leche.
- Almendra laminada tostada.
- En temporada añade gajos de naranja sanguina.
- Ralladura de piel de naranja.
- Una pizca de canela molida.
- Hojas de menta o hierbabuena.